¿REALMENTE SON MARICOMPLEJINES LOS DIRIGENTES DEL PARTIDO POPULAR?

domingo, 16 de diciembre de 2012


 





¿REALMENTE SON MARICOMPLEJINES?
O ES QUE SON CONSCIENTES DE QUE CON LA LINEA POLITICA TRADICIONAL DEL PARTIDO NO PUEDEN GANAR ELECCIONES
          

No sé si el término “maricomplejines” es originario de Federico Jimenez Losantos al que por cierto hace tiempo que no se lo escucho. Para los que no están al día, les diré que este es un término que lo utiliza mucho, el periodista mencionado y con él define o definía a los dirigentes del Partido popular en su actitud de con sus actos, intentar no molestar a la izquierda.

            Federico, junto a Cesar Vidal, abanderan desde una valentía arrolladora, la defensa de la verdad y la justicia. Virtudes que conforman la libertad y tan escasas en este país desde siempre. Son muchos los que los acompañan y aún más los que les siguen. Este país nunca podrá agradecer lo suficiente la labor que ambos desempeñan.

Durante el gobierno de Zapatero, este consciente de de la perdida de los iconos tradicionales de la izquierda intentó fomentar otros, unos nuevos y otros menos nuevos para así, sino mantener una diferencia en la línea ideológica de su partido respecto al Partido Popular, al menos que quedaran claro la diferencia de objetivos.

 Potenció la ley de igualdad hasta transformarla en una ley absolutamente inconstitucional y transformarla en ley de violencia de género en la que el hombre es presuntamente culpable mientras no pueda demostrar su inocencia. Apoyada por un lobby fanático y fantásticamente financiado por Zapatero.

Aprobó la ley de memoria histórica. Básicamente esta ley ha servido para enfrentar a la sociedad. Cuesta trabajo entender que mientras que ha querido obligar a que se olviden las víctimas de ETA de ayer mismo, se ha preocupado de levantar los muertos de hace casi un siglo.

Ha aprobado la ley de Eutanasia. Entrando en la conciencia de las personas.

Ha equiparado el matrimonio heterosexual con el homosexual cuando la constitución no lo ampara. Queda claro que buscaba con ello también enfrentar a la sociedad. No era tan problemático denominar esta unión de otra manera. Ni siquiera los votantes del Partido Popular tienen nada contra la unión homosexual aunque sí con la denominación.

Por último la desfachatez, el abuso de poder en la ley del tabaco. Un producto de consumo legal y del que el estado es el principal beneficiado por su comercialización y se prohíbe fumarlo en locales de ocio de financiación privada y expuestos a pérdidas y ganancias después de pagar impuestos.