Una Europa que lleva años primando la destrucción de las industrias productivas españolas, la Agricultura (aparte de facilitar la entrada de productos agrícolas de países extracomunitarios, por intereses particulares de otros países europeos, que nos hacen la competencia) la Ganadería, la Pesca, la Minería. Aparte de hacernos más dependientes de productos fabricados por otros países europeos.
Esta mañana he escuchado al señor
Rajoy en el congreso, defendiéndose de la oposición por la defensa que él hace,
de las políticas a las que nos obligan desde Europa.
A
Rajoy se le llenaba la boca de adjetivos grandilocuentes, defendiendo lo
importante y beneficioso que es ser más Europa. Relataba los años de paz y progreso que hemos tenido con mucha
diferencia de lo existente en otras partes del mundo. Está claro que este señor
hablaba desde su miopía en el conocimiento de la historia y desde su situación
dentro de una órbita social española privilegiada, a la que pertenece una
minoría cada vez más pequeña.
Durante el siglo XX, ayer mismo, hemos tenido
en nuestras tierras dos guerras mundiales con cerca de cien millones de
muertos. Hemos tenido un muro de Berlín durante cuarenta años que ha sido otra
forma de guerra. Hemos tenido la guerra de los Balcanes también con millones de
muertos y hasta ayer mismo y por último hemos tenido una guerra civil dentro de
nuestras fronteras, donde por cierto, también encubiertamente participaron los
dos bandos políticos de la Europa de entonces, no buscando la paz sino,
azuzando la contienda. Después de esto queda claro que este señor o tiene muy
mala memoria o es un ignorante.
En cuanto al
progreso, tal como decía usted ayer en el mismo congreso “defina usted
(progreso, que no) federalismo”. No creo que sea progreso, tener una Europa
pobre y otra rica, en la que siempre se hace lo que dice Alemania. Una Europa
que lleva años primando la destrucción de las industrias productivas españolas,
la Agricultura (aparte de facilitar la entrada de productos agrícolas de países
extracomunitarios, por intereses particulares de otros países europeos, que nos hacen la
competencia) la Ganadería, la Pesca, la Minería. Aparte de hacernos más
dependientes de productos fabricados por otros países europeos. Y todo esto
gracias a la incapacidad de nuestros dirigentes que han carecido de la más mínima
visión de estado y menos aún de futuro.
Ya en España,
el efecto de todo esto ha sido casi la destrucción total del tejido productivo
a cambio de una desbordada administración pública absolutamente imposible de
mantener. Una industria, la burocrática que ha sustituido a la productiva y
ahora, no tiene nuestro presidente lo que hay que tener para desmontarla. Un
número de parados superior al de cualquier país europeo. Una juventud a la que
los políticos les han quitado cualquier esperanza de futuro. Un país en el que
han dejado de contabilizarse los suicidios para que no se nos caiga la cara de
vergüenza. Un país en donde no deja de crecer el número de pobres o donde no
deja de crecer el número de desahucios por bancos que en muchos casos han sido
rescatados por nuestros impuestos.
Todo esto es
Europa señor Rajoy. Esa zona del mundo que no deja de perder competitividad
gracias a la enorme burocracia que se ha generado en ella. En la que España
después de recibir todo lo mencionado con anterioridad tiene que aportar doce
mil millones de euros anuales (dos billones de pesetas de las de antes). Me va
a disculpar señor Rajoy pero creo que no estoy muy de acuerdo con usted. Me
apunto a que me de otras razones.
Faustino Tomares