Todos los que hacen un
buen uso del conocimiento, nos recuerdan que no hay mejor manera para
adoctrinar, aborregar, además de debilitar las
defensas orgánicas, que provocando miedo
Todos los
medios de comunicación, todos –incluso los más lejanos al establisment- exigen
más medidas para controlar el corona-virus. Ninguno pone en cuestión o debate,
la necesidad o no del estado de alarma impuesto. Todos demandan la futura
vacuna. Todos admiten que la vacuna y el virus será una constante en nuestra
vida futura. Hoy la única diferencias entre los distintos medios, esta en; a
quien exigir la responsabilidad y posterior gestión de la actual “pandemia”.
Los medios comunistas buscan exculpar al gobierno de su mismo color, mientras
que los demás buscan clarificar su culpabilidad.
He sido uno
más de la “casi totalidad “de la
ciudadanía que ha admitido y comprendido
el seguimiento y las actuaciones que se hacían con la “pandemia”. Quizás el hecho de sentirme liberal, además
de ser influido por el pensamiento de George Orwell, ha dado lugar a que muy
poco a poco, casi sin darme cuenta, hayan ido agarrando en mi, pequeñas notas
discrepantes sobre el discurso oficial o “pensamiento único” al que yo por
norma y a riesgo de equivocarme, siempre me opondré.
Hace tiempo
que deje de ver la televisión, solo el fútbol, ni siquiera las películas por el
insoportable abuso en el exceso de publicidad
contra el tele-vidente. Mi refugio, naturalmente, las redes sociales.
Gracias a estas, he podido ir localizando, poco a poco, a los que discrepan del pensamiento único; Están los
científicos que ponen en duda la existencia de los virus en general, y que
afirman, son un invento de la industria farmacéutica. Están sus colegas que
aun, admitiendo su existencia, ven desproporcionado el nivel de alarma social y
hacen referencia a países que con medidas muchos más suaves, han reducido a
mínimos el contagio y las muertes. También están, los que definen el virus como
un tipo de gripe más y que solo es letal para las personas con insuficiencias
crónicas importantes, entre los que naturalmente, están los más mayores. Por
otro lado, están los que defienden una conspiración internacional desde los
poderes económicos para dar un gran bocado a la economía de la clase media.
Ni soy
científico, ni soy gestor político ni me debo a ninguna multinacional,
simplemente soy alguien que me gusta razonar lo que me llega, de salida y por
experiencia, no me creo nada y especialmente, lo que tiene influencia en mi vida.
Me quedo con el lema de la Royal Society de Inglaterra “Nullius in verba” en
español "No tomes la palabra de nadie", en cristiano “no te creas nada
mientras no te lo acrediten”. No me cuadra nada que una emisora de radio
que por naturaleza, lo cuestiona todo, hoy sea un portavoz más del ministerio
de propaganda del pensamiento único. No me cuadra que un periodista que se hizo
famoso por que nunca se creyó la versión oficial sobre el 11-M, además de cuestionarla
de todas las maneras posibles y rebuscar hasta en el más mínimo de los indicios,
hoy limite su labor de periodista, a ser el defensor más exigente a la hora de
pedir mas y mas, medidas más radicales
contra la “pandemia”. No me cuadra que
con una mortandad de 4.1 por millón de personas a nivel mundial, exista la
actual alarma y se considere como “pandemia”, máxime teniendo en cuenta que
quien le da este rango, es una organización de la ONU, de la que ya hace tiempo que para mí, carece
de la más mínima credibilidad. No me cuadra que desde que se empezaron a
contabilizar los contagios y muerte por este virus, no se haga en paralelo,
también con la gripe común.
Según los
entendidos, solo nos podríamos contagiar tras recibir directamente los virus en
nuestros ojos, nariz o boca, es decir tras un estornudo o contacto, evitable
con mantener una distancia mínima de un metro, sin embargo el gobierno, nos hace internarnos en nuestras
casas con la colaboración inestimable de toda la Oposición, parece que ha despertado
recientemente...ya veremos.
Habrá quien
cuestione este planteamiento en beneficio del bien general, incluso estando de
acuerdo con lo aquí expuesto. A esos, les recordaré que tenemos un Estado de
Derecho, todavía. Según parece cada vez hay más gente que solo ven su ombligo y
que anteponen demasiadas cosas a la libertad y la justicia. Por último, todos
los que hacen un buen uso del conocimiento, nos recuerdan que no hay mejor
manera para adoctrinar, aborregar, además de debilitar las defensas orgánicas, que provocando miedo.
Faustino.
Publicado en eldiestro.es
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