OTRA DE FALSOS PROFETAS

Sr. Lacalle; El daño económico, ya está hecho. Deje de tomarnos el pelo. Deje de hacer manifiestos para desviar la atención de la gente

Llevo mucho tiempo, elogiando a los númerosos economistas de corte liberal que tenemos en España. Sin embargo, desde hace menos tiempo, vengo observando que en la mayoría de los casos, estos economistas, cada vez más, bajan el volumen de su voz en temas transcendentales y que determinan  el futuro social y económico de España.

Hace unos días, nuestro ministro de Interior el Sr. Grande-Marlaska, que además es juez, decía  “Se estudiara el aislamiento de asintomáticos. El principio fundamental, es mantener la salud pública”. Este señor ha sacado poco provecho a sus estudios y a su larga experiencia como juez, aunque también pudiera ser que se encuentre muy cómodo en su actual sillón. Alguien con profundos conocimientos jurídicos y de nuestra constitución, le ha contestado “Demuestre usted si esa persona es portadora o no del virus. A partir de ahí, estudie normas, aprobadas por el Congreso,  para evitar el contagio, que desde luego, no pasan por privarlo de libertad.  La Libertad, entre otras cosas, si es Libertad, lleva implícito “La  responsabilidad de cada uno, sobre todos sus actos” Tengo que reconocer que desde hace ya mucho tiempo, nuestros distintos gobiernos, han puesto especial énfasis, en hacer una sociedad carente de ese sentido. Se les ha acostumbrado a que sus problemas, son siempre de “otros” el maestro,  el jefe, el ayuntamiento, la comunidad Autónoma, el Estado, etc.

Me ha llegado un manifiesto, firmado por algunos de estos economistas descrito con anterioridad, en el que en tres palabras, se hace una análisis muy correcto de la situación tan delicada que el régimen del 78 pasa en la actualidad, por los abusos cometidos por el presidente absolutista que gobierna por decreto y que le ha quitado la voz al Congreso de los Diputados, apoyado por el rancio comunista que se peina con cola. Se completa, en cuanto al estado de la situación,  con el destrozo que estos decretos, le han infringido a la economía. En el mencionado manifiesto, se hace mención al artículo 1º de nuestra constitución en el que nos recuerda que “España se constituye en un Estado social y democrático de derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político”. Para continuar con que “Es inmoral, en esta situación, trasladar a los ciudadanos que “son tiempos difíciles” para que paguemos nosotros la factura. No es admisible que el Estado sólo pueda mantenerse de la extracción de rentas de empresas y trabajadores” y bla bla bla bla. Para terminar diciendo, limitándose a lo económico “Así, los abajo firmantes exigimos al gobierno, que hagan el esfuerzo de reducir al máximo el gasto espurio para poder dedicar el excedente a la recuperación del tejido social y empresarial. Se trata de dedicar el presupuesto a la recuperación, para proteger a los trabajadores y autónomos y no incurrir en errores que lastrarán a nuestra economía y frenará el progreso de nuestra sociedad durante generaciones”

Sr. Lacalle; El daño económico, ya está hecho. La prioridad absoluta, debe de ser recupera r el estado de libertad anterior a los decretazos, que nos permitirán recuperar  rápidamente el anterior nivel de economía. Deje de tomarnos el pelo. Deje de hacer manifiestos para desviar la atención de la gente. La pelota, está en el tejado  del señor de la cola y hacia allí, hay que dirigir la intención.  La tibieza expresada a lo largo de los años por los partidos que se auto-denominan de “centro” a dado lugar a ello y podríamos llegar a un punto de no retorno en el recorte de nuestras libertades.

Faustino.
Publicado en eldiestro.es