Son muchos los convencidos de que si Cristo nuevamente se volviera carne,
nuevamente sería mal tratado,
vilipendiado y sacrificado por los pastores de la iglesia. Pastores que en su
gran mayoría son cómplices, cuando no protagonistas, de la degradación moral que
hoy padece nuestra sociedad
La pandemia nos está pegando muy fuerte. La gestión de
la misma, naturalmente, queda totalmente en manos de los gestores políticos que
a su vez cuando les resulta rentable, se apoyan en algún científico que por supuesto,
sea de su cuerda. Echo de menos la voz de pastores espirituales en cualquier
sentido, ya sea para reconfortar las almas, ya para orientar sus oraciones. Si
esta situación se diera en una película realizada al efecto, seguro que
veríamos al miembro más humilde de la iglesia y a escondidas de sus superiores,
dar su sermón a los fieles;
“Arrepentíos,
Ya está aquí nuevamente la cólera de Dios. Os habéis dejado arrastrar por la
vida fácil; La pereza, la soberbia, la lujuria, la avaricia y sobre todo la
envidia. Os habéis entregado en manos del diablo que os ha bendecido todos
estos pecados y habéis atentado contra toda ley natural y la ley de Dios.
Matáis a vuestros hijos antes de nacer, les dais más amor a los animales que a
las personas además de hacinar a los mayores en residencias para desentenderos
de ellos. Os humilláis ante los poderosos para abusar y maltratar a vuestros
iguales, maldecís al género masculino solo por el hecho de serlo, premias y
excusáis a vagos y maleantes, envidias al que trabaja y busca una sociedad más
justa y más libre y colmáis de virtudes
y admiración a todo colectivo anti-natura.
Arrepentíos. Todavía estáis a tiempo. Dios en su
infinita bondad os perdonara. Recuperad el buen camino. Dejad el “yo” y retomar
el amor al prójimo. Todo amor dado, vuelve multiplicado. Ese es el verdadero
camino de Dios. Quien bebe de El, nunca tendrá sed.
Más o menos, pero naturalmente, tendría que ser en una
película de ficción. Como bien saben, todas las terminales importantes de
propaganda, están controladas por el poder.
Dios es refugio de los afligidos, de los necesitados.
Pero cuanto más opulentas son las sociedades, mas se alejan de El. Hoy
preferimos delegar la salvaguarda de nuestras necesidades a papaymama-estado
que progresivamente, nos va haciendo en general personas cada vez más incapaces y carentes para asumir todo
tipo de responsabilidades. Así y todo, todavía hay quien mantienen la fé en
Dios. Son los que no delegan sus
capacidades para el razonamiento; los que saben que todo es efímero, los que saben
que donde hoy todo es felicidad mañana puede ser tristeza, y también los que saben que lo que hoy todo es favorable, mañana se puede tornar
adversidad.
Sabemos como actuaron los primeros cristianos en
Alejandría, apenas iniciada esta religión, lo sucedido con Las Cruzadas, como
el papado crea la Inquisición, o porque Lutero se hace notar. Su actuación
durante la segunda guerra mundial, aún ofrece muchos interrogantes.
Son muchos los convencidos de que si Cristo nuevamente
se volviera carne, nuevamente sería mal tratado, vilipendiado y sacrificado por los
pastores de la iglesia. Pastores que en su gran mayoría son cómplices, cuando
no protagonistas, de la degradación moral que hoy padece nuestra sociedad. Una
institución cegada por el poder y la riqueza terrenal, en la que solo la labor
pastoral de algunos miembros del mas
bajo escalafón, algunos rosan la santidad, hacen que no pierda toda su credibilidad.
Faustino.
Publicado en eldiestro.es
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