LA DICTADURA ECONOMICA

miércoles, 5 de marzo de 2014


PROVOCADA POR  LOS OLIGOPOLIOS DE OBLIGADO CONSUMO EN ESPAÑA.

 

            Hasta hace, algunos años, vivíamos en la dictadura de Franco. Yo tenía 17 años cuando murió el dictador. La verdad es que yo desde mi visión, apenas pude ver deferencia entre aquella época y la que vivimos ahora. Quizás...que apenas se veían desnudos en revistas y películas, igual que  ahora, una vez ya pasada la tormenta de pornografía que hemos sufrido en la transición y hasta fechas recientes. Recuerdo por aquella época que mi hermana, algo mayor que yo, llegaba todos los días ya de madrugada porque venía de tomar en el “Morapio” de la calle Rodrigo de Triana muchas cervecitas con los amigos y amigas que mas tarde gobernarían España a través del PSOE.

            Por aquella época, al menos aquí en Tomares, mi pueblo, al final de un noviajo que concluía en boda, la vivienda del matrimonio estaba terminada y pagada. La novia, una vez casada, dejaba de trabajar y era el marido a partir de entonces quien únicamente trabajaba para mantener a toda la familia que casi siempre, además de la mujer,  la compondría unos pocos de hijos y en muchos casos algún abuelo. Los gastos de suministros; electricidad, agua, gas y teléfono e incluso la gasolina para los coches de la época (era cuando a los coches se le echaban veinte duros de gasolina, sesenta céntimos de los de ahora) apenas incidían en el presupuesto total de los gastos de la familia. Luego nos cambiaron la moneda y con ello vino, la actual estafa a las clases medias.

            Hoy después de casarse una pareja de economía media. Lleva una hipoteca casi para toda la vida, en muchos casos, cercana al sueldo base interprofesional. Naturalmente los dos miembros que componen la pareja tendrán, si tienen suerte, que jubilarse trabajando. Hijos, a ser posible, uno solo o dos como mucho, tres ruina garantizada. Los  abuelos si los hubiera, salvo que tengan una buena paga, a una residencia de la tercera edad. Los gastos de suministros, se comen otro sueldo base y la gasolina y la amortización del coche se puede comer otro. Definitivamente una economía de una familia media, esta del todo intervenida por los oligopolios existentes en la economía española: por los  bancos con sus hipotecas, las empresas de suministros de obligado consumo, las petroleras que nos venden las gasolinas, las de telecomunicaciones, las de comunicación, las de Transportes etc. etc. Con lo poquito que nos queda, si es que nos dejan algo, tenemos que comer, vestirnos, llenar las casas de muebles y electrodomésticos, educar a nuestros hijos y  llevarlos de paseo, pagar impuestos, comprar medicinas, pagar seguros de todo tipo, etc. etc.

Así y todo somos libres para votar cada cuatro años a partidos políticos que se limitaran a aprobar las leyes que los grandes oligopolios existentes en España les vayan imponiendo. Siempre contra las clases medias y contra las pequeñas empresas. Aquello era una dictadura y lo de ahora una democracia.

Faustino Tomares.