La inexistente austeridad

lunes, 1 de octubre de 2012

La inexistente austeridad Luis del Pino. ¡Aleluya! ¡Estamos salvados! ¡Rajoy ha presentado unos presupuestos austeros para el año que viene! Ayer se conoció el detalle de los presupuestos que ha elaborado el PP para el próximo año, la letra pequeña de lo que Montoro presentó el jueves a grandes rasgos. A los españoles se nos ha subido el IVA, se nos ha incrementado el IRPF, se nos han disparado las tasas, se nos han aumentado los impuestos al tabaco o a los hidrocarburos, se nos han introducido copagos farmacéuticos y hasta se nos va a quitar un veinte por ciento de los premios de la lotería. Así que lo menos que cabía esperar es que Mariano Rajoy presentara unos presupuestos de guerra en los que no se dilapidara ni uno solo de los euros que tanto trabajo nos cuesta ganar a los españoles y que con tanto dolor de nuestro corazón nos quitan. Bueno, pues fíjense si son austeros los presupuestos que: - los pobrecitos muchachos del cine español recibirán el año que viene 55 millones de euros en subvenciones, mientras que los del teatro se quedarán con 37. Eso sin contar los 56 millones de euros que nos cuesta en Instituto de la Cinematografía y de las Artes Escénicas. -el Consejo de la Juventud, esa utilísima institución que sirve para colocar a algunos miembros de las juventudes de distintos partidos, incrementará su presupuesto en 300.000 euros, pasando a costarnos 2,6 millones. Eso sin contar los 26 millones de euros que, por otro lado, constará el Instituto de la Juventud. - a la reestructuración de la minería del carbón, que llevamos reestructurando treinta años sin que nunca termine de reestructurarse, dedicaremos 539 M€. Eso sin contar los 45 millones de euros dedicados a "Desarrollo alternativo de las comarcas mineras del carbón", ni los 457 millones en subvenciones a la explotación minera. - los partidos políticos, tan necesitados ellos de dinero como cualquier ciudadano, se embolsarán 63 millones de euros en subvenciones directas del Ministerio de Interior. - en prevenir la contaminación y el cambio climático, esa estafa que está tan de moda, gastaremos un poco menos: sólo 49 millones de euros. - Televisión Española, ese imprescindible órgano de comunicación que todo gobierno necesita para adoctrinar a los ciudadanos con el fin de que se conviertan en hombres de bien, se llevará 292 millones de euros de nuestros impuestos. - por si acaso fuera poco e hiciera falta comunicar mejor la actividad de don Mariano Rajoy, el presupuesto para "Cobertura informativa" de Presidencia del Gobierno pasa de 17 a 60 millones de euros. ¡Diez mil millones de pesetas para cubrir informativamente a Rajoy! No sé con qué le cubrirán; debe de ser con billetes de 500 euros. - en Cooperación al desarrollo, esa partida con la que se financian desde cursos de sindicalismo en Egipto hasta seminarios de liberación sexual en el altiplano boliviano, el PP se gastará 519 millones de euros. Nuestra presencia internacional lo requiere. - en política activas de empleo, ese eufemismo con el que se designan medidas que encubren, entre otras cosas, el agujero negro de los cursos de formación para parados, el Gobierno se ventilará 3.765M€. Eso es solo un pequeño muestrario de los gastos que el Gobierno del PP ha incluido en los presupuestos del año que viene. Gastos para sufragar los cuales nos está exprimiendo como si fuéramos limones. Además de los propios gastos del Estado, y esto es lo más grave, el Gobierno continúa sin meter mano en el agujero negro de las cuentas de las autonomías, diputaciones y demás entes locales. El día en que estalle la pelota de deuda real de toda nuestra administración periférica, el guano nos va a llegar hasta las orejas. En conjunto, según los presupuestos, el Gobierno no solo no va a disminuir nuestro grado de ruina, sino que la deuda del Estado se incrementará en otros 50.000 Millones de €uros. Estamos hablando de casi 10 billones (con b) de pesetas más que el Gobierno pedirá prestados al año que viene. Y todo esto suponiendo que los presupuestos de este año se cumplieran (que no se están cumpliendo, con lo que nuestra deuda crecerá aún más) y suponiendo que también se cumplieran las previsiones tremendamente optimistas de evolución de la situación económica que el Gobierno ha elaborado para 2013. Si esas previsiones resultaran ser falsas, y tienen todo el aspecto de serlo, nos podríamos ver abocados a un colapso. Yo no sé a qué juega este Gobierno, aunque lo sospecho: a llevar hasta el límite la capacidad de resistencia de los españoles, en un vano intento por preservar el estado de las autonomías y el actual statu quo político. Con lo que la ruina está asegurada. Los presupuestos del año que viene van a traer austeridad, sí, pero solo a los ciudadanos de a pie. 30 de Septiembre de 2012 Editorial del programa Sin Complejos del domingo 30/9/2012 Es Radio