IDEOLOGIAS Y CRISIS ECONOMICA

jueves, 24 de enero de 2013


LO PEOR DEL COMUNISMO Y DEL CAPITALISMO HAN CONSAGRADO ESTE MODELO SOCIO-ECONOMICO EN ESPAÑA

Todos en más de una ocasión nos habremos preguntado qué ha sucedido en España para llegar a la situación de desesperación económica a la que hemos llegado. Muchos nos hemos preguntado cómo es que gobernando en España durante toda la democracia tanto la izquierda como la derecha más o menos  en equilibrio, con alternancias y con políticas de partidos con estas ideologías hemos llegado a este punto.

                Desde mi punto de vista, desde mi base de observación y de sufrir el problema muy en mis carnes, soy autónomo. Tengo muy claro lo que ha sucedido: Los conceptos más claros de la izquierda, se ha respetado. Los conceptos más claros de la derecha también se han respetado. Y en medio, el sector más productivo pymes y autónomos, ha sido el sacrificado y con ello el final de la economía productiva de España. Como árbitros, los Partidos Políticos, casta que ha sacado los mayores dividendos de la situación lamentable en la que estamos  y que ellos han provocado. Paso a explicarme:

-La izquierda con la derecha haciendo la vista gorda, se ha preocupado mucho de defender a la clase trabajadora, perfectamente apoyada por unos sindicatos, hipersubvencionados (unas veces por el PSOE, fiel a sus propósitos de defender a los trabajadores y otras veces por el Partido Popular, pero este, por miedo a enfrentarse a ellos) El resultado ha sido una clase trabajadora con amplios privilegios en la administración pública, en las grandes empresas subvencionadas  y en las PYMES. Como aliados necesarios de los Sindicatos han operado las Multinacionales, firmando esos Convenios Colectivos que siempre perjudicaban a las empresas. Eso sí, convenios con clausulas de desenganches para las Multinacionales firmantes. Y así, sus trabajadores nunca tienen el poder dentro de estas, como sucede en el resto de las empresas que se ven obligadas a cumplir los convenios colectivos  al no tener capacidad jurídica como le sucede a las multinacionales para poder  desengancharse de los convenios colectivos.

-Por otro lado la misma derecha con la misma izquierda haciendo la vista gorda, ha permitido que las Multinacionales (con toda clase de beneficios fiscales, laborales y gracias a una normativa infinita que siempre se desarrollan  contra las PYMES) formando oligopolios se hayan quedado con todos los sectores estratégicos de la economía. Ha provocado una burocracia imposible para PYMES y Autónomos que no tienen capacidad económica para financiar esas normativas tan innecesarias pero que tanto benefician a las multinacionales sobradas de capacidad financiera. El resultado es la desaparición de los primeros en beneficio de grandes oligopolios de multinacionales que han destrozado nuestra economía productiva y nuestro modo de vida

 

 El resultado de todo esto es un proteccionismo exagerado de la clase trabajadora por un lado y el ejercicio del capitalismo salvaje por parte de las multinacionales. En medio, el sector auténticamente productivo, el que crea  riqueza y puestos de trabajo, las PYMES, que han sido totalmente aplastadas por los sindicatos y la defensa de sus trabajadores(que no de los trabajadores en general) por la izquierda y las Multinacionales por la derecha, haciendo competencia desleal gracias a su principal aliado, el gobierno, que siempre legisla  a favor de estas y en prejuicio de aquellas sin importarle para nada el beneficio social que siempre debe de prevalecer por encima del beneficio empresarial.

Faustino Tomares.

DE CÓMO LA DIPUTACION DE SEVILLA SIGUE DERROCHANDO DINERO PUBLICO

lunes, 21 de enero de 2013


La diputación de Sevilla presidida por el señor Rodriguez Villalobos va a colaborar con el ayuntamiento de tomares, “plan actúa” para rectificar los reductores de velocidad vulgarmente denominados como badenes. Hace tres años más o menos, la concejal de izquierda unida Valme Sanchez, presentó una moción en el ayuntamiento de Tomares, precisamente exigiendo la adaptación de los badenes existentes en el pueblo a la normativa que recientemente había aprobado el ministerio de fomento. En aquel pleno, era yo entonces concejal de tráfico, le mostré un documento elaborado por mi delegación,  en el que se desarrollaba el trazado de los badenes instalados en Tomares, que curiosamente era exactamente igual a la normativa que más tarde aprobó el ministerio de fomento. Quedando claro que los badenes, en general,  se adaptaban perfectamente a la legalidad.

            Todo eso por desgracia ha caído en saco roto, o en el olvido por parte de nuestro ayuntamiento, que aunque no va a poner dinero, si va a permitir que la diputación siga derrochando dinero público que también es de los tomareños.Los badenes de Tomares, en su gran mayoría, están dentro de la normativa y si alguno no lo está, se arregla con una capa de asfalto de valor ínfimo, poco más que arreglar un bache de los habituales. También lo hice en su momento y por eso lo se.

Desgraciadamente, sigue primando el interés de la  diputación por despilfarrar dinero público, en este caso en colaboración con el ayuntamiento de Tomares en obras innecesarias (sería interesante conocer el gasto en cartelería a mayor gloria de la diputación) en vez de gastarlo en economía necesaria y productiva que parece ser, no le interesa a su presidente.


 

Faustino Tomares.

LA TELA DE ARAÑA DE ANDALUCIA Y DEMAS AUTONOMIAS

viernes, 18 de enero de 2013


En Andalucía tenemos una publicación, creo que incluso hay un libro editado, sobre el entramado corrupto del Partido Socialista. Entramado elaborado gracias a su continuidad en el gobierno de la Junta de Andalucía, durante toda la época democrática.

Recientemente, envié al autor de la mencionada publicación lo que yo entendía que era un caso, sinó de corrupción, al menos si de abuso de poder y de derroche de dinero público de un partido que no era el PSOE. La contestación de este señor, fue mandarme otro caso de corrupción del partido protagonista de la tela de araña de Andalucía. No demostró interés alguno por lo que le envié.

La contestación me dejó descolocado por culpa de mi ignorancia. Evidentemente, yo pensaba que el periodista investigador buscaba denunciar la corrupción. Puede que en un principio así fuera. Tras bastantes días buscando respuesta en mi subconsciente por fin el consciente ha visto la luz. A este señor, no le interesa la verdad, ni siquiera acabar con la corrupción. Solo le interesa la corrupción del PSOE. Este señor ya se ha alineado con la oposición donde ha encontrado un filón económico o de subsistencia, como tantos periodistas. Solo le interesa la corrupción que llega desde el Partido Socialista. Para nada la corrupción en general.

Desgraciadamente estas telas de arañas, se dan en todos los gobiernos donde un mismo partido se ha prolongado en el tiempo, tanto en ayuntamientos como en diputaciones, mancomunidades, todo tipo de empresas públicas y como no en las autonomías. Tenemos CIU en Cataluña, PNV en el País Vasco, PP en Valencia. Estas son las más notorias. Hay otras muchas en las que sucede esto mismo, sin embargo, la docilidad de los periodistas, bien  financiados desde el poder, evitan que nos enteremos.

Faustino Tomares.

 

Violencia feminista: “Una mujer policía atropella varias veces a su exmarido en Málaga”

miércoles, 16 de enero de 2013



 

¿Que diferencia hay entre este intento de homicidio, en la que la agresora, por su profesión sin duda bien entrenada, ataca con brutalidad a su exmarido, porque “no pudo soportar que rehiciera su vida“?

¿Que diferencia hay con esos otros crímenes, también por celos o emociones similares, cometidos por hombres sobre mujeres? ¿Por qué ese tratamiento diferenciado en los medios, en los protocolos policiales, ante la justicia, en el Código Penal?

La respuesta ya la conocemos: intereses económicos, industria del maltrato de la que se lucran las feministas radicales, y demagogia electoral aparentemente de defensa de la mujer. Es decir: Totalitarismo de/gener/ado ‘de género’.

F.O., secretario de la PCI.

La España oficial y la España real

lunes, 14 de enero de 2013


Este articulo de una jurista de reconocido prestígio, merece la pena leerlo:
Sostiene que la brecha entre políticos y ciudadanos es similar a la del franquismo
Dice que falla la rendición de cuentas de los representantes y la igualdad ante la Ley

Creo que hay que remontarse al final del franquismo para encontrar una brecha tan amplia entre la España real y la España oficial como la que pone de relieve la reciente encuesta del CIS, así como otras muchas realizadas a finales de 2012, incluida la encargada por este mismo periódico. Una brecha que va en aumento, lo mismo que el desafecto por la clase política que, asombrosamente, pretende no darse por enterada o, a lo sumo, habla de planes de Secretaría General Técnica o tira de BOE para enfrentarse a una Crisis Política con mayúsculas. Otro tanto empieza a ocurrir con la Monarquía, muy alejada en el fondo y en la forma de las nuevas generaciones que no vivieron la Transición. Mientras tanto, los pobres ciudadanos ya no dan crédito ni al discurso oficialista, ni a las entrevistas oficialistas (veáse la reacción frente a la concedida por el Rey a Jesús Hermida) ni a los medios oficialistas, dudando entre lanzarse a la calle o al exilio. Un panorama desolador. ¿Cómo hemos podido llegar hasta aquí? Y lo más importante ¿Cómo salimos de aquí?

En cuanto a lo primero, las causas de esta separación entre la España oficial y la España real son muy variadas pero podríamos resumirlas así: mientras la España oficial vive cada vez más ensimismada, aislada en una auténtica burbuja política, mediática y empresarial que amortigua los ruidos que llegan de la España real, bunkerizándose a ojos vista para defender sus intereses, la España real lo está pasando cada vez peor y no sólo económicamente. La España oficial parece abocada -como bien ha explicado el profesor Luis Garicano- a un proceso creciente de «peronización» muy preocupante, en que se combina la defensa a ultranza de los intereses propios de la partitocracia (confundidos interesadamente con la defensa de lo público) con la creciente confusión entre lo privado y lo público, con la inevitable corrupción que este modelo genera. Conviene recordar que hay estudios que hablan de la correlación positiva entre el incremento de la presencia de políticos en empresas y la corrupción de un país

En este proceso se intercambian todo tipo de favores: desde los normativos hasta los económicos, pasando por las colocaciones de políticos y ex políticos algunos de ellos con trayectorias que darían miedo en cualquier país serio. En todo caso, esta situación impide que en la España oficial se perciba con nitidez la realidad, que se identifiquen correctamente los problemas y, lógicamente, que puedan resolverse. Quizá el caso más llamativo es la posición del Gobierno central respecto a la situación en Cataluña, un problema político de gran magnitud que se pretende resolver como si fuera un problema ordinario de naturaleza jurídica, pero hay innumerables ejemplos. En este contexto, los españoles de a pie, la España real que sufre la crisis económica, política y moral en sus carnes está entre perpleja e indignada. Y se siente -con razón- estafada. Como en un juego de magia, ven como se les están escamoteando no sólo los productos de muchos años de esfuerzo y trabajo, sino también la confianza que depositaron en la democracia y sus valores. Valores como el de la igualdad de oportunidades, esencia de la meritocracia en que fueron -fuimos- educados la mayoría, ciertamente al menos dos o tres generaciones de españoles. Así los españoles a los que se nos educó en la confianza de que el estudio, el esfuerzo, el trabajo, la honradez, la competencia, la capacidad, el mérito, el talento, eran las claves para conseguir una mejora de las condiciones de vida y también las claves para el éxito y el prestigio laboral o profesional no entendemos nada. Porque las claves del éxito laboral o profesional resulta que ahora son otros. En estos tiempos importa más a quien se conoce que el qué se conoce, o qué se sabe hacer. En la España del 2013 se progresa (o se sobrevive dado los tiempos que corren) mucho más fácilmente si se ha hecho carrera en un partido político, o a la sombra de un cargo público, o si se es pariente o protegido de alguien importante, o si se tiene un cargo o responsabilidad pública desde el que se pueda hacer favores que después sea posible cobrar. Y las reglas en algunas empresas importantes del Ibex no parecen muy distintas, la verdad.

Y -esto es quizá es lo más grave desde el punto de vista político- los españoles también se sienten estafados porque hay otros valores consustanciales a la democracia, como la igualdad política o la igualdad de todos ante la Ley, o la obligación de los representantes de rendir cuentas a sus representados que tampoco se respetan. Porque lo cierto es que en España ya no es verdad que la Ley sea igual para todos, para gobernantes y para gobernados, para poderosos y para débiles, para ricos y para pobres. Sin necesidad de poner ejemplos concretos, el que nuestra democracia pueda coexistir con una enorme cantidad de cargos públicos imputados, o el que se indulte tranquilamente a condenados por delitos contra las Administraciones Públicas, se incumplan las sentencias del Tribunal Supremo cuando a los políticos no les gustan o se cambien las leyes cuando una persona poderosa lo necesita, o asuste tanto la transparencia deja claro donde estamos. En cuanto a la rendición de cuentas de nuestros representantes, qué vamos a decir cuando se asume con tranquilidad que una vez que se celebran las elecciones, los electores se tienen que estar muy quietecitos durante los años que medien hasta las siguientes, y cuidadito con preguntar nada sobre las promesas electorales que se hicieron para atraerles a las urnas o con exigir cualquier tipo de responsabilidad jurídica por la mala gestión, las corruptelas o el despilfarro del dinero de los contribuyentes.

Creo que estas son algunas de las claves de la divergencia entre la España real y la España oficial, que no es la primera vez que se produce, como recordarán los lectores de la obra del mismo nombre de Julián Marías, escrita al comienzo de la Transición, en cuyo título me he inspirado para este artículo. En aquel libro Don Julián sostenía que la España oficial, concebida en oposición a la España real, no puede ser otra cosa que la España de la irrealidad.

En cuanto a lo que se puede y se debe hacer, ya lo explicó él en su momento, con el optimismo que le caracterizaba, más necesario que nunca. Él confiaba en que la España real tenía mucho más empuje, valor, fuerza y sentido común que la oficial. Por ello, ¿qué tal si en vez de esperar que nos caiga de la España oficial la solución a nuestros problemas nos ponemos nosotros a ello? Podemos hacer y decir muchas cosas de aquí a las siguientes elecciones o a la siguiente encuesta que impidan a la España oficial seguir ignorando por más tiempo a la España real.

¿Complicado librarse de la costra, que diría Ortega, de la España oficial? Sin duda, por eso hay que hacer un esfuerzo de imaginación, de voluntad, de actividad. De forma que cada uno de nosotros, sin pensar en lo que le pueda costar o en la incomodidad que le pueda suponer, haga en el espacio público -esto es importante- lo que considere correcto, no lo conveniente. En el trabajo, en la Administración, en los foros, en la calle. Y hay que decir la verdad, aunque sea a los políticos, sobre todo a los políticos.

¿Ejemplos concretos? Desde denunciar los abusos y conductas irregulares de los que tenemos cerca y conocemos bien -siempre más difícil de hacer que denunciar los abusos y corruptelas lejanos, pero bastante más efectivo- hasta dejar de comprar periódicos que silencian casos de corrupción por motivos económicos, pasando por respetar las normas también cuando nos viene mal. Seguro que a ustedes se les ocurren muchas más. ¿Que no sirven para nada? Prueben a hacerlas y ya verán si sirven.

En definitiva, si no queremos que la España oficial siga diciendo que es la España real no dejemos que se confundan hasta que sean indistinguibles.

 

Elisa de la Nuez es abogada del Estado, fundadora de claves y editora del blog ¿Hay derecho?